lunes, 13 de junio de 2011

Cinco cosas peligrosas que deberías dejar hacer a los niños. Gever Tulley.

Cuando nacemos tenemos una tendencia innata hacia la experimentación y el aprendizaje. Por eso los juguetes aburren tanto a nuestros pequeños. En cuanto aprenden todo lo que se puede aprender de ellos, los desechan y se dedican a golpear el mando a distancia hasta conseguir abrirlo para aprender cosas a su nuevo nivel. No somos seres pasivos, estamos diseñados para la actividad y el compromiso. A base de horas frente al televisor, continuas restricciones "por su seguridad" y cuando hacemos las cosas en su lugar, porque no les vemos capaces, no hay tiempo o no queremos que manchen; conseguimos poco a poco matar su iniciativa y creatividad. Además les impedimos la creacion de conexiones sinápticas cerebrales originadas por todas esas nuevas experiencias tan tontas para nosotros y tan importantes para ellos.

Muchas de las actividades de este blog te pueden parecer básicas o simples, y no las haces. Piensas, "mi hijo ya es capaz de hacer eso y las desestimas". Creo que todos somos capaces de hacer casi todo, pero lo importante es hacerlo, porque es entonces cuando aprendes de esa actividad o de la derivación de la misma. Intenta que tus peques hagan actividades variadas y no repetitivas, sean éstas u otras. Invítales al mundo de las nuevas experiencias.


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