Fantástica iniciativa para el Día Universal de la infancia.

Hoy me siento en la NECESIDAD de compartir esta maravillosa iniciativa del colegio de Dani, Agora Sant Cugat. Me ha emocionado tanto que mis ojos se llenaron de lágrimas.

Cada niño recibió un monigote en cartulina con la consigna de decorarlo y colgarlo en una especie de poster gigantesco con forma de abeto navideño, en el hall del centro. La idea era colaborar con un euro de donativo en favor de los niños pobres y poder llevarse otro monigote a elección del peque.

El jueves Dani me dice: "Mamá, ¿Sabes que hay niños muy pobres que necesitan nuestra ayuda?" y llevó al cole su monigote "astronauta", lleno de piedrecitas plateadas, dispuestas con la habilidad de un niño de 4 años pero el cariño de uno de 80.

Salió de clase enfadado y quisquilloso:
Dani: "Mamá, no me has dado el euro."
Mamá: "Bueno, ahora no tengo pero ¿era para el viernes, no?"
Dani: "No, era para hoy. Jana tiene su monigote y a mí me van a quitar el Papá Noel precioso"
Mamá, sin darle ninguna importancia: "No te preocupes, mañana estará allí."

A la mañana siguiente entrando en el hall del cole, Dani ve el imponente árbol formado por los monigotes y se pone nervioso. "Mami, mami, mi euro." Sale como una bala entre una pequeña multitud de papis y nenes a los pies del árbol. Veo a un ratoncillo moverse cual ardilla entre la gente y a un lado del árbol, observo unas manitas emerger entre el gentío y levantar monigotes con mucho cuidado. Me acerco y de repente veo la luz en sus ojos. Con la destreza y dulzura de un cirujano despega suavemente un monigote y me dice emocionado: "Mami, es mío, el Papá Noel. Voy a enseñárselo a Miss Carol y a todos mis amigos." Se va tan absorto que se olvida hasta de darme mi beso.

En casa, admirando su Papá Noel perfectamente colocado por él y presidiendo el salón me dice: "Mami, ¿alguien tendrá mi astronauta en su casa?" y luego prosigue: "Mami, si hay niños pobres de 4 años como yo, también habrá de 2 años como David. Y David no ha hecho un monigote para ayudarles." (David no va aún a ese cole).

Así que esta tarde David llevará a su "hombre ojos de enteja".

Hoy he aprendido que mi hijo ya sabe lo que quiere, que existe bondad en su corazón y que lo que más nos gusta en esta vida son las cosas mágicas. Gracias profes por regalarnos estas enseñanzas.