Aprovechando la semana blanca del cole de Dani, el domingo 11 regresamos de unos fantásticos días en la nieve. (Disculpad por el retraso de esta entrada. Gracias Fer por descuartizar mi ordenador hasta hacerle escupir por fin esta entrada) Al peque David, amante de los bloques de madera y deportes de pelota, le enrolamos en un master intensivo de construcciones y descubrimiento de parques en la fantástica ciudad de Logroño con su abu Chencho, gran Arquitecto Técnico y Maestro en Educación física, como Director pedagógico. (Saluditos a todos los amables riojanos.)
La montaña del Tarter, Andorra, nos dio la bienvenida con un cálido sol. Afronté la experiencia como unos simples días de relax en la naturaleza aderezados con saludable deporte, sin más pretensiones. A Dani le apuntamos en el jardín de nieve y yo me sentí obligada a enrolarme también tres horas diarias en un curso para alargar el inevitable y venidero: "Mami, ¿en qué pista dejaste de seguirnos?". Dani aprendía a la misma velocidad que descendía, inverosímil y yo descubría que mis alocadas bajadas se podían acompañar de algo llamado "técnica". Fer se dedicaba a hacer el cabra en el snow park y colgar sus peripecias en el facebook. Los días discurrían alegres, nieve y sol en la mañana para concluir con tres horas de saltos, carreras y chapuzones en el Spa del hotel. Uff mis chicos no se cansan nunca...
(Eso es un angel... tocado de un ala)
Cuando le expliqué a Dani lo acontecido, con tono serio, el que da la sabiduría de la experiencia, me dijo: "Mamá, si la profesora te dice que cojas velocidad, tú no le hagas caso. Tienes que ir a tu ritmo o te pasarán cosas como ésta." ¿Qué se puede responder a una afirmación tan razonable de un niño de cuatro años? Copié la cara del emoticono perplejo y la mantuve el resto de la jornada.
El día siguiente amaneció helador, nevando y con una horrible ventisca. Gracias Dios. Con esta climatología más una muñeca rígida y hinchada como el muñeco michelín, lo más razonable era dejar a los varones a su ritmo y abandonarme a las compras en la ciudad de Andorra para probar el real alcance de mi lesión colgándole bolsas.
(Dani delante del reloj de agua de Andorra la Vella)
Lo que hemos aprendido:
Dani:
- Este intensivo de velocidad, coordinación y equilibrio seguro que ha creado fantásticas conexiones neuronales en su cerebro.
- El relacionarse con gente nueva, de distintas edades seguro que ha abierto grandes puertas en el área social del cerebro de mi peque.
Mami:
- Tras un "vos sabes" desconfiad de las ideas preestablecidas sobre el concepto de "llano".
¡Madre mía que tatuaje en tu muñeca! Pero como happy flower que soy (y puesto que no te leo lamentándote) míralo como un recuerdo fotográfico más de la maravillosa aventura que habéis pasado, jejeje.
ResponderEliminar¡Y totalmente de acuerdo contigo en que seguro que se han desarrollado nuevas conexiones entre las células cerebrales de tu lindo peque con esta estimulante experiencia!
Ya ves lo que hace la edad, jajaja, ellos suman en positivo y nosotras vamos cuesta abajo...
Recibidos tus besitos creativos!
No sé cómo llegué aquí (probablemente gracias a Maribel de B aprende en casa) ¡pero es un placer leerte! Y disfrutar de tus vuestras fotografías!
saludos de una riojanita.. y contra el moratón ya saber "árnica
ResponderEliminar" que para los golpes de nenes\as va muy bien, je,je
Ostras.... ¿¿como esta tu muñeca?? si ya vengo yo diciendo que ya a estas alturas, aunque estemos estupendas, no estamos para ciertos trotes.... jajajaja.
ResponderEliminarY con respecto al enano, está claro que se adaptan a todo y todos con una facilidad impresionante.
Un besote grande¡¡¡
Muchos besitos Pilar, a ver si para Semana Santa puedo ir a verificar que todo sigue igual en la laurel. Besitos.
ResponderEliminarVaya golpe! Espero que te encuentres mejor. Qué sabios son los peques. Besikos!!
ResponderEliminarHa sido genial leer tu aventura, supersimpático y las fotos geniales...también voy a seguirte ;)
ResponderEliminarY sólo con 2 entradas :O
:)
Yo al mio ya le he acostrumbrado y me dice que quiere ir de pinchos a la Laurel a por su mini hamburguesa y su bocata de jamón.
ResponderEliminarIgual nos vemos, ya sabes, Logroño es pequeño.
Lo que nos estamos riendo con tu prosa humorística tus seguidoras, bien vale un moretón!
ResponderEliminarBuena decisión la de las compras, a grandes males, grandes soluciones!
Por cierto, qué pasada el reloj de agua!! Nunca he visto uno, a ver si me animo, total, si Andorra está aquí al lado. Tengo el hobby incontrolable de fotografiar cuantos objetos curiosos me encuentro para enseñárselos a mis alumnos, me tengo que conseguir la de ese reloj!
ResponderEliminarUy Begoña, que Dani siempre me dice que cuando alguien se cae, de reirse nada, que es de mala educación. Así que a ver si contenemos las risillas que todavía cuando saludo con la mano me parezco a la reina. No sé va esta rigidez de muñeca... Habrá que ver tu colección de fotos de objetos curiosos. Seguro que con lo buena fotografa que eres merece un blog para ello solo. Bueno que gracias por tu supervisita al blog y que te mando un millón de besos.
ResponderEliminarHola Maria! soy Raquel una mami que quiere ir a la nieve antes de que se vaya y quisiera saber a donde fuiste que había ese parque infantil con tobogán porque a mi hijo seguro que le gustaría mucho. Gracias
ResponderEliminarHola Raquel. Fuimos a Andorra a la estación del Tarter que justo a la salida del funicular hay un edificio self service con este parque de juegos detrás. Creo que el año que viene cuando vayamos con David, iremos a Soldeu porque el jardín de nieve (curso de 3h) por la mañana es el mismo y luego por la tarde tienes la opcion de 2h en la guarde. La guarde del Tarter era pequeña y "muy aburrida" según Dani. Solo fue un día. La guardería de Soldeu era inmensa y tenía muy buena pinta. Besitos creativos y ánimo con la nieve.
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