Ahí va la fiesta más esperada del año... esperada por David claro. Si recibiste la
invitación, adelante.
Dani nos da la bienvenida.
Hay que venir bien guapos para fotografiarse en el Photo booth. (La silla es de Ikea con una sencilla caja desplegada y recortada con forma de trono.)
Si estás preparado puedes llamar al timbre que suena a Mickey mouse.
Pasarás junto a unos chupa chups gigantes y flores olorosas.
Una vez dentro encontrarás muchos juguetes de oferta. Incluso un arbolito de halloween y de navidad, se puede convertir en un árbol de juguetes.
Quizá quieras probarte una falda y llevártela a casa si te queda bien. (Os dejo la hoja para imprimir los precios
aqui.)
O tal vez te apetezca ojear unos cuentos.
También podrás ser un caballero y esconderte en un castillo.
Pero nunca, nunca toques la batería o todos los globos saldrán volando como encantados.
Después de esto, te encontrarás con un artilugio muy extraño.
Seguro que a más de uno se le ocurre convertirlo en piñata mágica llena de sorpresas, eso sí, sólo si vas bien maquillado.
Lo que pasa es que todo esto da mucha hambre, así que puedes llenar un cono de papel colorido con patatas, gusanitos...
Si te pasas por la cocina, encontrarás tu kit de merienda personalizado cantarín, con su zumo, su sandwich, sus filipinos y su yogur de "apretar" (según el cumpleañero).
Son unas bolsas de zip (mercadona) y dentro llevan una servilleta de ikea con motivos de aves. Os dejo las imágenes de los pajaritos que he creado para imprimir sobre papel adhesivo con el nombre del invitado,
aquí. También os dejo las tiras superiores
aquí.
También tenemos las tortillas de la abu Mayte para los más grandes. (Gracias abus por venir a mi cumple.)
Por fin lo más esperado. Soplar la vela a oscuras... ¡¡Felicidades!!
Como bailamos y saltamos en el colchón gigante, acabamos agotados, pero muy felices.
Y llegó la hora de cerrar.
Al día siguiente, David lo pasó pipa jugando con el chulísimo pupitre que le regaló su primito Miguel y con todos los demás fantásticos regalos. Millón de gracias por estar conmigo en mi fiesta, en
persona o en pensamiento.